Aunque el Ministerio de Salud defendió el contrato para la adjudicación de 16 plantas de oxígeno a una empresa que apenas tenía un capital de 17 mil bolivianos, la comisión de recepción expresó su disconformidad con el proceso de contratación de las plantas generadoras.
La comisión integrada por los profesionales Javier Alcón Cruz, David Barrios Imaña, Alfio Callisaya Quisbert, Adriana Mamani Lazarte y Stefano Hassenteufel Balderas recomendó no continuar con la compra de dichas plantas mediante una carta dirigida al abogado Armin Cortez Aliaga, responsable del proceso de contratación directa en el Ministerio de Salud.
El hecho se conoce un mes después de que venció el plazo para la entrega de las 16 plantas generadoras de oxígeno para la atención de la Covid-19, adjudicada a la empresa Hardtronic Tecnología e Ingeniería que presentó un capital de operaciones de 17 mil bolivianos, pese a que el monto de la compra alcanza a 39,8 millones de bolivianos.
Esta irregularidad fue observada por el ministro de Justicia, Iván Lima, en una carta enviada a su colega de Salud, Jeyson Auza. Esas y otras observaciones, como que la empresa no tenía el perfil para la instalación de plantas de oxígeno, fueron ignoradas.
Después de que el caso fue denunciado por Brújula Digital, el Ministerio de Salud defendió el proceso contratación y acusó a este medio de “mentiroso” y de realizar un “ataque mediático infundado”.
“Los precios referenciales para la adquisición de las Plantas Generadoras de Oxígeno oscilan entre los 4 y 5 millones de bolivianos. El Ministerio de Salud y Deportes adjudicó las plantas a 2,4 millones de bolivianos, 50% menos que las otras plantas adquiridas en Bolivia”, aclaró entonces.
Para esa fecha, la empresa que se adjudicó el contrato ya había incumplido el compromiso, por lo que pidió la ampliación del plazo de entrega.
Reunión de alto nivel
El proceso de contratación directa de las 16 plantas generadoras de oxígeno generó la molestia del propio presidente Luis Arce, quien de acuerdo a información a la que accedió Brújula Digital, se reunió con los ministros de Salud y Justicia, y la comisión encargada del proceso de contratación a quienes hizo conocer sus observaciones.
En la nota enviada por Lima a Auza, el 31 de diciembre de 2021, se indica que la empresa carece de experiencia en materia de importación en equipamiento de salud y que no tiene la solvencia económica para adjudicarse un contrato de gran envergadura, pero Auza dijo que la comunicación de su colega llegó tres semanas después de que se firmó el contrato.
En una conferencia de prensa, el 21 de febrero, el titular de Salud justificó la insolvencia de Hardtronic. “El hecho de que una empresa tenga cierto capital no es un elemento para rescindir aquello (el contrato)”, explicó entonces.
Después dejo en manos de la comisión de recepción el informe de evaluación “si los tiempos se han cumplido, si la calidad se ha cumplido y ellos determinarán cual es el proceder de este proceso que todavía continúa”.
//FUENTE: LOS TIEMPOS//