Bolivia espera un fallo “equilibrado” y asegura que la soberanía jamás estuvo en disputa en el juicio por el Silala

Bolivia comunicó este jueves que espera un fallo “equilibrado” de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya, en el litigio iniciado por Chile por las aguas del Silala. Hoy jueves concluyó la fase de alegatos orales y el veredicto saldrá en los próximos meses.

Roberto Calzadilla, embajador nacional en Países Bajos y agente en esa controversia, aseguró que la soberanía jamás estuvo en disputa y destacó cuatro premisas que se defendieron durante todo el proceso.

“En el juicio han quedado aclarados algunos puntos centrales en esta fase de los alegatos, primero, que la mayoría de las aguas del Silala provienen de aguas subterráneas; segundo, que se construyeron canalizaciones para incrementar y mejorar el flujo de las aguas; tercero, que hubo muchas propuestas de negociación y compensación que no llegaron a materializarse; y cuarto, se estableció claramente que nos preocupa de sobremanera el daño causado a los bofedales con la canalización”, sostuvo el representante.

Destacó que los juristas y especialistas que formaron parte del equipo nacional expusieron de manera clara, concreta y respaldada la posición boliviana, sustentada en el “pleno derecho sobre las aguas del Silala, también sobre el flujo mejorado producto de la canalización, que incrementa significativamente el flujo natural”.

Asimismo, el embajador enfatizó que “queda claramente establecido que nuestra soberanía jamás ha estado en disputa, nuestra posición para resolver esta controversia siempre ha sido el diálogo y la conciliación con un país hermano, fundamentada en estudios técnicos y científicos”.

Insistió en que el país “tiene el derecho a decidir si mantiene las canalizaciones para entregar este flujo en virtud de un acuerdo o desmantelarlas con el fin de reparar los daños medioambientales” y cerró su comunicado afirmando que “Bolivia saldrá siempre adelante”.

El caso se remonta a junio de 2016, cuando Chile presentó su demanda. En julio de 2017 Bolivia entrega su memoria y un año después su contramemoria y contrademandas. En febrero y mayo de 2019 ambos países remiten la réplica y dúplica, y en septiembre de esa misma gestión, la vecina nación entrega un documento adicional.

//FUENTE: EL DEBER//