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En el marco de los actos por la efeméride paceña, el Monseñor Percy Galván, Arzobispo de La Paz, expresó un llamado a las autoridades para que se liberen a los detenidos preventivos, es decir, a las personas que están en las cárceles sin sentencia.
“Pedimos a nuestras autoridades de Justicia, pedimos a nuestro Gobierno, pedimos a nuestro Dios, gritamos como pueblo de fe para que se liberan los detenidos preventivos. ¿A quién más debemos gritar? Primero que se haga proceso justo y después se sentencie a la gente y no que se les meta a la cárcel y se empiecen los procesos”, clamó Galván.
El Monseñor lamentó que en Bolivia, así como en otras partes del mundo, gobierno una justicia que actúa en base al “ojo por ojo, diente por diente”. Llamó a que el país sea modelo de justicia y aplique los principios cristianos de misericordia, perdón, reconciliación y otorgar una segunda oportunidad.
El tema del abuso de la detención preventiva es de preocupación de organismos de defensa de derecho humanos, como también se expresó en el informe del Relator de la ONU, Diego García-Sayán.
Según el informe de García-Saýan sobre Bolivia, se señala que existían 18.703 personas privadas de libertad en recintos con capacidad para 5.346. Además, del total de encarcelados, el 64% estaba con detención preventiva, es decir, sin sentencia.
Galván propuso que se analice cada caso de detenidos preventivos y que se otorgue detención domiciliaria, mientras se averigua la culpabilidad.
//FUENTE: ERBOL//