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Sacabamba se convirtió ayer en tierra de nadie. Una turba del Comité de Emergencia del Valle Alto, que dice defender el agua del río Siches y rechaza una planta de residuos en Sacabamba, irrumpió en el pueblo, deshizo las barricadas, golpeó a los habitantes y quemó el campamento de la empresa Colina.
La muchedumbre llegó en una gran cantidad de buses, similares a los que hacen el servicio de transporte a Cliza, y no tuvo contemplación con quien se interponía a su paso. Hasta el alcalde José Luis Luque dijo que tuvo que huir para “salvar su vida”. Los más radicales rodearon, increparon y golpearon a una periodista de Unitel. Luego, impidieron que los equipos de prensa de Los Tiempos, Red Uno y otros registren el ataque.
Lo peor se desató cuando la turba, liderada por jóvenes, llegó al campamento de Colina, en la parte alta de Sacabamba a 40 km de la ciudad. El municipio está desde hace una semana por los bloqueadores del comité.
Los lugareños y trabajadores que resguardaban el lugar tuvieron que replegarse, no tuvieron tiempo para sacar sus pertenencias.
Los comunarios del valle alto que integran el comité entraron en avalancha con palos, machetes, picotas, hondas y otras armas.
La turba sacó todo lo que había en los cuartos del personal, habitaciones en contenedores (containers) adaptadas para ser habitables en el predio de 60 hectáreas y equipadas con generadores. Después quemaron los contenedores, los volcaron y derribaron el muro perimetral.
La policía del valle alto intentó ingresar al lugar para apaciguar los hechos, pero luego desistió porque la turba era más numerosa.
Los dirigentes, como Grover Meneses, que lideran la movilización desde la pasada semana, ayer estaban desaparecidos. Los buses que trasladaron a los manifestantes se quedaron en el ingreso del predio de Colina. En tanto, en la turba había personas en estado de ebriedad.
La movilización no tuvo nada de “pacífica” como dijeron los dirigentes del comité al señalar que después de un cabildo en Cliza irían a Sacabamba para verificar si evidentemente Colina paralizó los trabajos en el sector.
Cerca de las 14:00 la turba se retiró del lugar y la policía recién ingresó para determinar los daños a la propiedad privada.
La Defensoría del Pueblo condenó ayer las agresiones a la prensa y pidió a los llamados sectores sociales a respetar el trabajo periodístico.
La empresa Colina no descarta iniciar acciones legales en contra de los responsables, debido a las afectaciones que sufrió el campamento. Se conoce que en las próximas horas brindará una conferencia de prensa.
El gobernador Humberto Sánchez dijo que el bloqueo del comité es injustificado, porque no se ha dado ninguna licencia a Colina.
En tanto, a través audios en redes sociales se denunció que el comité obliga a las personas a movilizarse con amenazas de multas de 200 bolivianos y, además, se refiere de forma peyorativa a los periodistas.
Hay varios bloqueos en la vía al valle alto: en el cruce a Tarata, en el cruce a Tolata, camino a Sacabamba y en varias vías principales de Cliza. En diferentes puntos los sectores sociales evitaron el paso de la prensa por lo que el retorno fue complicado.
La Central Única de Trabajadores Campesinos de la provincia Esteban Arze rechazó los bloqueos y advirtió con desbloquear. Nelson Virreira aseveró que perjudican a Sacabamba, Tarata y Mizque.
//FUENTE: LOS TIEMPOS//