El Gobierno de Donald Trump está considerando la posibilidad de una reunión con Irán esta semana entre el enviado especial de Estados Unidos para Medio Oriente, Steve Witkoff, y el ministro de Asuntos Exteriores iraní, Abbas Araghchi, para buscar un acuerdo nuclear que permita un cese al fuego en el conflicto desatado entre el régimen islámico de Teherán e Israel, según revela el medio estadounidense Axios, citando cuatro fuentes que tuvieron acceso a la información.
“Se está considerando una reunión con los iraníes esta semana”, confirmó un funcionario estadounidense, que calificó este eventual encuentro como el momento “decisivo” para determinar si Estados Unidos se une a Israel en su ofensiva para eliminar militarmente el programa nuclear de Irán, que ha sido duramente golpeado por los ataques de Israel de los últimos días, pero que sin las bombas antibúker que posee EEUU no es posible destruir la planta subterránea de enriquecimiento de uranio de Fordow para acabar con la posibilidad de que Teherán desarrolle armamento nuclear.
Por este motivo, Trump considera por el momento las bombas antibúnker como una herramienta disuasiva clave para presionar al régimen iraní para que acepte un acuerdo nuclear que permita poner fin al conflicto bélico con Israel, que inició el viernes con una sorpresiva “ofensiva preventiva precisa” contra objetivos nucleares y jefes militares de la tiranía iraní como parte de una “acción combinada, basada en inteligencia de alta calidad”, según el Ejército israelí, ante el peligro de que “Irán ha producido suficiente uranio altamente enriquecido para nueve bombas atómicas”, de acuerdo con declaraciones del primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu.
Las dos opciones sobre la mesa
Más temprano, el New York Times había publicado que el presidente Donald Trump se estaba debatiendo entre dos opciones: entrar de inmediato en la guerra y respaldar a Israel, especialmente con las bombas antibunker, u ofrecerle una negociación al régimen iraní para desmantelar su programa nuclear a cambio de detener la guerra y permitirle permanecer en el poder.
Todo indica que la Casa Blanca habría decidido agotar la segunda opción antes de decantarse por la primera, que no ha sido descartada, pues el presidente Donald Trump solo estaría dándole una última oportunidad al régimen de Teherán, ya que si bien por un lado se ha negado hasta el momento a participar directamente en los ataques e incluso habría vetado la posibilidad de que Israel elimine al líder iraní, Alí Jameneí, por otro lado también ha dejado claro que no permitirá que Irán pueda desarrollar bombas nucleares.
Ahora el mandatario republicano está poniendo a prueba su capacidad de negociación con los iraníes, puesto que Netanyahu ha estado presionando para que EEUU se una a la guerra para poder acabar con la planta subterránea de Fordow, mientras que Trump ha insistido en que puede llegar a un acuerdo con Teherán aprovechando la débil posición en que se encuentra el régimen.
- ///FUENTE: PANAM POST///