Petróleo y gas a las estrellas en la UE

RODOLFO FAGGIONI

La guerra en Ucrania y el aislamiento económico de Rusia, continúan teniendo muy nerviosos a los países de la Unión Europea. Las materias primas siguen aumentando de precio, no sólo el gas y el petróleo, también cereales como trigo y maíz, o minerales como el níquel y paladio mientras el oro, refugio seguro por excelencia ha llegado a valer 2.500 dólares por onza.

Las Bolsas de Valores del mundo entero suben y bajan en continuación e indiscreción de estos últimos días es de un plan de la Unión Europea sobre la emisión de Eurobonos para financiar el gasto energético y de defensa.

El protagonista de estos días es el níquel, cuyo aumento de precio es fenomenal, en pocos días ha aumentado del 250%, con un precio actual que supera los 100.000 dólares por tonelada y ha forzado a la Bolsa de Metales de Lóndres, primero en suspender los contratos y luego en cancelar las órdenes ya concluidas.

El precio del níquel, del que Rusia es el tercer productor mundial, lleva días tensos por los temores a una disminución de la oferta global.

El auge de este metal utilizado en diferentes producciones industriales, desde el acero inoxidable hasta las baterías para automóviles, ha obligado a los inversores que habían apostado en la disminución del precio del metal, a cerrar sus contratos sobre las que no han podido reintegrar los márgenes dados como garantía alimentando una espiral alcista. Una fuga que costó perdidas mutimillonarias a los propietarios de las principales productoras de níquel.

El recrudecimiento de la guerra, también empujó el trigo a nuevos máximos que cerraron con un nuevo récord de 13 dólares por bushel en la Bolsa de Chicago, mientras en París el trigo aumentó del 15%.

Rusia y Ucrania juntos valen una cuarta parte de la producción mundial de trigo que se utiliza para alimentos básicos.

 

RODOLFO FAGGIONI

Periodista y Corresponsal en Italia. Miembro efectivo de Prensa Internacional

*NdE: Los textos reproducidos en este espacio de opinión son de absoluta responsabilidad de sus autores y no comprometen la línea editorial Liberal y Conservadora de Visor21.