A través de sus redes sociales, el jefe del Partido Liberal Conservador, Andrés Ortega, respondió a un post del empresario Marcelo Claure, en el que el CEO boliviano se autodefine como «libertario» para justificar su apoyo al candidato de la alianza Unidad, Samuel Doria Medina, para las elecciones de agosto.
En las últimas horas, Claure de definió como libertario y dijo que es contrario al socialismo.
«Aclaremos algo con firmeza: yo soy libertario, capitalista y defensor absoluto de la inversión privada. Jamás apoyaría a un socialista radical.
Por eso apoyo a Samuel Doria Medina, porque no es socialista. Ha dedicado su vida a promover la economía de mercado, la empresa privada, la inversión extranjera y la apertura de Bolivia al mundo», posteó Claure.
Ortega, quien fue el primer diputado en declararse liberal, capitalista y de Derecha luego de casi un siglo de historia parlamentaria en 2010, ahora es candidato a un curul plurinominal en las listas de Acción Democrática Nacionalista (ADN).
Esta es la extensa respuesta de Ortega a Claure:
«He leído con atención su declaración en defensa de Samuel Doria Medina, en la que afirma ser “libertario, capitalista y defensor absoluto de la inversión privada”. Permítame responderle con la claridad que exige la verdad y el respeto al pensamiento liberal que usted invoca sin fundamento.
El liberalismo no es una etiqueta de moda. Es una doctrina moral y política fundada en tres principios sagrados: vida, libertad y propiedad privada. Y quien los traiciona, aunque se declare libertario, no lo es.
Apoyar a un político que ha declarado públicamente que “respeta la elección” de las mujeres respecto al aborto —eufemismo cobarde para hablar de la eliminación deliberada de una vida humana inocente— es una contradicción frontal con el primer principio liberal: el derecho a la vida. Sin vida no hay libertad ni propiedad que defender.
Apoyar a un político que es vicepresidente de la Internacional Socialista, organización históricamente colectivista y estatista, es otro error. Usted intenta justificarlo diciendo que ya no es una organización de socialistas radicales. Pero eso es como decir que un cáncer es más tolerable porque ahora crece más lento. El liberalismo no negocia con el socialismo: lo combate.
Y aún más grave es pretender que Samuel Doria Medina representa el libre mercado. Señor Claure, usted sabe tan bien como yo que Samuel Doria Medina ha hecho su fortuna no en un mercado libre, sino en un mercado cautivo, controlado, dependiente del favor político. Sus únicos tres grandes clientes han sido siempre el Gobierno Central, la Alcaldía y la Gobernación. Eso no es libre empresa, es empresariado prebendal.
No se trata de inversión privada: se trata de acuerdos con el Estado. De contratos obtenidos a la sombra del poder político. De fortunas construidas gracias a la cercanía con los gobiernos de turno. Eso no es capitalismo. Eso es capitalismo de compadres, el mismo modelo corrupto que ha empobrecido a Bolivia y que hoy usted quiere disfrazar de liberalismo.
Decir que Bolivia no necesita “fanatismo ideológico” es, en este contexto, una forma de decir que los principios no importan. Pero sí importan, y mucho. Bolivia está como está justamente porque una clase política y empresarial se ha acostumbrado a vivir del Estado mientras predica eficiencia y modernidad.
Usted podrá hacer declaraciones altisonantes. Podrá repetir palabras como “libertario”, “capitalista” e “inversión privada”. Pero mientras apoye a figuras que viven del Estado, pactan con el socialismo internacional, relativizan el derecho a la vida y se arrodillan ante lo políticamente correcto, sus palabras carecerán de todo contenido moral e ideológico.
El liberalismo no es un disfraz para redes sociales. Es una causa que se defiende con coherencia, valentía y principios. Algunos estamos aquí para defenderla sin pactos, sin matices, sin servilismo.
Porque vida, libertad y propiedad privada no se negocian.
Atentamente,
Andrés Ortega
Candidato liberal – Bolivia».