Vivimos una crisis social bastante difícil donde la auténtica alternativa al colectivismo romántico (Promovido por cientistas radicales como Chomsky y Lewontin) implementado fielmente por los gobiernos masistas no es el «libertario de derechas», sino el reconocimiento de que la generosidad social procede de una compleja serie de pensamientos y sentimientos cuyas raíces están en la lógica de la reciprocidad. Esto le da una psicología muy distinta del reparto comunal que practican los organismos sociales, las familias humanas y los cultos ideológicos que intentan simular que son familias.
El emprendedor principal en materia de innovación social jamás será el Estado. «El Estado emprendedor» es una trampa ideológica y una mentira científica que no alentaremos. Eso sí, el Estado debe estar al servicio de los individuos, los colectivos, los emprendedores, los exitosos y también de los menos privilegiados para evitar que el futuro de estos se perpetúe en un círculo social sin salida de la pobreza y el servilismo.
Quien llevará la voz cantante en la innovación dentro de la economía moderna no ha de ser el sector público, sino el sector privado. El emprendedor principal en materia de innovación social ha de ser el privado, los emprendedores. El Estado es demasiado cortoplacista y demasiado adverso al riesgo como para que pueda dirigir y coordinar la innovación más revolucionaria y rompedora frente a la incertidumbre del futuro.
El sector privado tiene mayor capacidad de innovación y en la mayoría de las veces supera en velocidad, iniciativa, flexibilidad y eficiencia al sector público. Proponemos seguir ese camino en mérito a poder insertarnos en el mundo y optar por el multilateralismo y lograr abrir lazos comerciales y culturales con diferentes regiones tanto con los de nuestra propia región latinoamericana, como con Norteamérica, Europa, y también Asia y Oceanía.
Libertad e igualdad ante la ley. Nuestro plan presenta al país medidas específicas, objetivos concretos, y estrategias para responder por qué el desarrollo del capitalismo social y popular es la única solución a los retos del nuevo milenio.
Estas medidas se traducen en las 5 políticas de Estado derivadas de nuestro plan, que serán la base de la conformación de la unidad política posible para la transformación del país.
POLÍTICAS PÚBLICAS
Las políticas de Estado no cambian, aunque cambie el gobierno, marcan el rumbo del país. Es por ello que nuestra propuesta se basa en 5 políticas principales, los pilares fundamentales para el desarrollo de un nuevo país:
1.- Nueva relación de los ciudadanos con el Estado, basada en la confianza, la credibilidad entre gobernantes y gobernados, ampliando y fortaleciendo el proceso de reconciliación nacional y democrática del país. Sin impunidad para la corrupción y los delitos. Con libertad de expresión y libertad de prensa. Respeto mutuo entre todos. Donde la educación debe ser la principal herramienta para que nuestra sociedad comprenda dónde queremos ir y cómo llegar.
2.- Política de gestión económica y responsabilidad fiscal. Fortalecimiento de la vocación productiva nacional con visión exportadora. Respeto al rol del Estado y las alianzas Público Privadas para avanzar en conjunto, Estado y privados hacia el desarrollo del país, que ambos de manera individual no pueden conseguir. Salvataje y reconstrucción económica profunda, con reformas de raíz. Mediante políticas de respeto irrestricto al proyecto de vida del prójimo, basado en principios de no agresión institucional, en defensa del derecho a la vida, la libertad y la propiedad privada, cuyas herramientas son la economía de mercado libre de intervención estatal y la libre empresa. Respeto a la libre oferta y demanda. Donde se comprenda que el estatismo en la economía es el virus más letal. Parar el déficit fiscal, liberar los precios, devolver el sistema de libertad y propiedad privada. Con un Banco Central Independiente. Y Seguridad jurídica mediante la independencia judicial e institucionalidad general.
3.- Política exterior, donde Bolivia debe ser un país de integración regional con visión exportadora y comercial. Para la estructuración de cadenas de suministros para producción y la industria nacional y regional. Bolivia no debe alinearse ni apoyar a dictaduras comunistas, regímenes totalitarios, ni mantener silencio a la destrucción de todo tipo de derechos humanos ejercido por las dictaduras comunistas. Esta tercera política de Estado debe conducir a la construcción de un gobierno de los Derechos Humanos.
4.- Política de separación de poderes, respeto a los derechos individuales por encima de cualquier aspiración colectiva legítima o no. Penalización severa en contra de la impostura de la cultura del bloqueo como violación al derecho individual de tránsito y propiedad privada. Retorno y respeto a los principios políticos esenciales de la República Boliviana.
5.- Política de Seguridad Interna y externa, basada en la cooperación regional inter agencias de seguridad de los países. Lucha contra el narcotráfico y represión del crimen organizado y los delitos transnacionales de trata y tráfico, esclavitud moderna, narcotráfico y tráfico ilegal de armas y órganos.
- MARCEL RIVAS FALON
- Ex Director General De Migración
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