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La supuesta abogada de la Presidencia del Senado, Silvia Vásquez, coordinaba acciones para agredir a la hija de la expresidenta constitucional Jeanine Áñez, Carolina Ribera, en plena etapa de alegatos finales en el montaje del caso “golpe II”, según evidenciaron medios de comunicación presentes en juzgados.
Un reporte de Página Siete da cuenta de los mensajes de texto que intercambiaba la representante que luego fue negada como funcionaria dependiente de Andrónico Rodríguez, con los grupos de choque instalados fuera del Tribunal Primero de Sentencia en La Paz, para cercar la salida de Ribera, quien se encuentra acompañando a la defensa de su madre desde la instalación del proceso.
“A los compas que están afuera, en puertas del Tribunal. Divídanse en las dos puertas: una en la Yanacocha y otra en la puerta principal que es en la Potosí. Así no podrá salir tan fácilmente Carolina. Pasar la voz”, es la instrucción que da un contacto de la abogada de nombre Gabriel Rodríguez en el grupo de WhatsApp de funcionarios y militantes masistas.
El grupo de choque precisamente es conformado por funcionarios de distintas reparticiones, como el Senado y la Procuraduría, que hacen “vigilia” con wiphalas en mano, para reclamar “justicia por las víctimas de Senkata y Sacaba”, cuando el juicio es por las figuras de presunto incumplimiento de deberes y resoluciones contrarias a la Constitución, en los días 10 al 12 de noviembre de 2019.
Áñez, anoticiada de esos extremos hizo el reclamo en plena audiencia y responsabilizó de cualquier agresión a su hija al gobierno de turno.
“Los acuso públicamente, cualquier cosa que le pase a mi hija es responsabilidad de los miembros del Gobierno, de la parte acusadora, que no están conformes solo de llevar este proceso de la manera como están llevando, sino que quieren amedrentar a mi hija. Y todo lo que le vaya a pasar es responsabilidad de ellos”, expresó Áñez.
El representante de las denominadas “víctimas de las masacres de 2019”, David Inca, aclaró esa figura y dijo que este caso, denominado “golpe II” solo beneficia al expresidente, exvicepresidente, expresidenta del Senado y expresidente de Diputados, que se presentan como parte acusadora en el proceso que ya tiene una sentencia en puertas.
“El juez no va a sacar una sentencia a favor de las víctimas de Senkata, sino va a sacar una sentencia a favor de cuatro víctimas, y las únicas cuatro víctimas que están contempladas implícita o explícitamente son Evo Morales, Álvaro García Linera, Adriana Salvatierra y Víctor Borda. Nadie más, ésas son las únicas víctimas, las que hubiesen sufrido la negativa de un derecho, en este caso, a la sucesión constitucional”, aclaró Inca.
Este jueves se inició la etapa de alegatos de la defensa de Áñez, con los descargos para dejar sentado que en noviembre de 2019 se vivió una etapa de emergencia política ante el vacío de poder que dejaron Morales y toda la línea sucesoria a la Presidencia.
El abogado Luis Guillén adelantó que como defensa se pedirá la absolución de Áñez en este proceso, pues la parte acusatoria de la Fiscalía, Procuraduría y Senado no pudieron demostrar “elementos probatorios” para decir que la entonces senadora asumió el mando del país sin respaldo constitucional, como señala el reglamento de la Cámara Alta y la Declaración constitucional 003/2001.
“Durante el desarrollo de este proceso no se ha construido objetivamente la culpabilidad de la exmandataria de Estado y ante esta ausencia de elementos probatorios, de elementos objetivos, ante esta ausencia de identificación de cuál sería la conducta la acción atípica sus autoridades deben emitir una sentencia absolutoria”, declaró Guillén.
Al menos dos recesos se dieron en la jornada de jueves, por descompensaciones de la expresidenta en plena audiencia, desde el penal de Miraflores.
//@VISOR21/ foto: Archivo ABI//