Tres especialistas en ingeniería geotécnica que forman parte del Comité de Geoingenieros sin Fronteras (GeoWB) publicaron un artículo sobre la estabilidad de las pendientes de La Paz frente al cambio climático y el crecimiento urbano. Una misión de esta entidad llegó en junio para conocer cómo el Gobierno Autónomo Municipal de La Paz implementó técnicas vanguardistas orientadas a estabilizar suelos en altas pendientes.
Producto de ese intercambio de conocimientos y experiencias, los profesionales extranjeros del comité conocieron obras de envergadura que se ejecutan en La Paz, como el proyecto de estabilización de la zonas Inmaculada Concepción y 14 de Septiembre en Cotahuma. Tras las visitas técnicas a las Superobras que están en curso, los especialistas destacaron las técnicas que son utilizadas para estabilizar los suelos.
“Durante la visita, los ingenieros de la delegación de GeoWB pudieron verificar que los estudios y las obras de estabilización que se realizan en la ciudad de La Paz se están llevando a cabo utilizando técnicas de ingeniería geotécnica de vanguardia”, destaca una parte del artículo sobre este tema publicado en el boletín de junio de la Sociedad Internacional de Mecánica de Suelos e Ingeniería Geotécnica (ISSMGE)
Si bien el artículo destaca el trabajo integral que realiza la Secretaría Municipal de Resiliencia y Gestión de Vulnerabilidades (SMRGV), los especialistas consideran que existen limitaciones que impiden alcanzar un éxito mayor en los trabajos de mitigación.
“La Formación La Paz ofrece un potencial considerable para futuras investigaciones geológicas y geotécnicas, en particular para evaluar el rendimiento de las técnicas de estabilización actuales y explorar alternativas rentables y escalables. Si bien las estrategias de mitigación existentes demuestran su mérito técnico, su éxito se ve limitado por la rápida expansión urbana descontrolada, las limitaciones económicas y la creciente influencia de los factores de estrés hidrológicos impulsados por el clima”, señala otra parte del artículo.
En el escrito los especialistas rememoran que en su visita técnica a La Paz se realizaron evaluaciones de las condiciones de estabilidad de los taludes y se hizo un análisis de las estrategias que implementa la SMRGV para mitigar riesgos. Parte de esas evaluaciones dieron como resultado que los problemas que presentan los taludes están asociados a suelos parcialmente saturados que pueden permanecer estables si se aplican “gradientes verticales”.
Asimismo, la identificación de depósitos coluviales, que se refieren a la acumulación de sedimentos que se desprenden de los taludes, debido a la presión de fluidos puede provocar movimientos a gran escala.
Para frenar este tipo de movimientos, la SMRGV emplea la técnica de construcción de pilotes profundos que, ocasionalmente, se unen con túneles de drenaje “para interceptar planos de falla conocidos”, según revelan los datos del inclinómetro, instrumento que es utilizado por el personal edil desde la gestión pasada.
Si bien se han construido numerosos túneles de drenaje en toda la ciudad, los especialistas plantean una duda en torno a la eficacia de esta técnica, dado que “es incierta a largo plazo”, a lo que se suma los costos de financiamiento.
La visita técnica también sirvió para identificar que existe un desarrollo en las laderas que no está regulado y que, además, existe preocupación por los efectos que el Cambio Climático pueden tener sobre el suelo, especialmente con el aumento e intensidad de las lluvias.
La misión de los Geoingenieros sin Fronteras posan junto al alcalde Iván Arias y el personal de la SMRGV. Foto: SMRGV.
Recomendaciones
Tras todo el análisis realizado, la misión del Comité de Geoingenieros sin Fronteras (GeoWB) realizó tres recomendaciones para fortalecer el trabajo de la SMRGV en su afán de hacer de la ciudad de La Paz un lugar más seguro para vivir.
En primera instancia sugiere tener información georreferenciada detallada sobre la ubicación de los túneles de drenaje profundo que se han construido en la ciudad para hacer una evaluación posterior a la construcción.
También propone, como segunda medida, darle un papel a las universidades y asociaciones de profesionales para fortalecer técnicamente este trabajo y promover investigaciones aplicadas.
Finalmente, la misión plantea “adoptar un sistema de monitoreo basado en interferometría satelital”, lo que puede ser muy útil para “medir con precisión los cambios en la superficie terrestre, como los movimientos del suelo”.
- ///FUENTE: AMUN///