Inteligencia hizo seguimiento durante dos meses a presidente de la Juventud Yungueña

La unidad de inteligencia de la Policía realizó un seguimiento de 71 días al presidente de la Juventud Yungueña, Raúl Uria Aguirre, para aprehenderlo el 15 de septiembre. Según la Fiscalía, es acusado por el delito de tráfico de armas, por transportar artefactos explosivos para la Asociación Departamental de Productores de Coca (Adepcoca) para su movilización. Su abogado asegura que existe un “montaje procesal”.
Según el reporte del sargento que hizo seguimiento y cuyo informe fue adjuntado a la imputación, Uría llegó a las instalaciones del mercado de Adepcoca ubicado en la zona de Villa Fátima, llegó al día siguiente, martes 7 de julio, participó de la movilización de los cocaleros orgánicos, lo reconocieron que estaba acompañado de otra persona que presuntamente era su “mano derecha”.

“El 7 de julio de 2022, el segundo día de movilización (que pedía) el cierre del mercado paralelo, se logró identificar a Raúl Uría Aguirre en la calle 10 de Villa El Carmen, junto a un grupo de personas que portaban morrales color kaki, en la fotografía se ve con alias Tayson quien es mano derecha de Raúl”, señala en una parte de la imputación a la que tuvo acceso la ANF.

El documento también describe el trabajo que realizó el sargento de policía. A las 18:40 del 9 de agosto Raúl y un grupo de ocho personas llegaron a Adepcoca en un vehículo color amarillo y llevaban morrales y bolsas de saquillo “con probabilidad el saquillo y los morrales contendrían dinamita”.

“Este grupo se identifica con en el nombre de las “Juventudes Yungueñas” y se logra identificar a Raúl Uría Aguirre como el líder de este grupo. Una hora más tarde enfrentó a las fuerzas del orden con explosivos y armas no convencionales”, describe el documento.

El jefe de inteligencia refiere en su informe que Uría junto a otras dos personas de sexo femenino realizó la compra de material explosivo, dinamita, cordón, detonante y petardos en la plaza del minero de la ciudad de El Alto. “Aspectos que se corroboraron en razón que, en el celular de J.C. M., dueña de la tienda se encuentra registrado el número de celular (y) el nombre de Raúl. Extremos que demuestran la relación comercial que sostenía el sindicado con la dueña de la tienda”, indica el documento.

El 14 de septiembre, el presidente del Comité de Autodefensa de Adepcoca, Cesar Apaza, denunció que se detectó a 30 policías infiltrados, de tres de los cuales se obtuvo información, mediante sus celulares, sobre la persecución y las pruebas que pretendían plantar contra Freddy Machicado y los dirigentes.

La madrugada del 15 de septiembre, mediante un video mostraron que Uria fue aprehendido cuando realizaba un viaje al Beni, pero recién lo notificaron a las 07:00 de su aprehensión. Al día, siguiente se realizó su audiencia de medidas cautelares y el juez dispuso su detención preventiva en el penal de San Pedro por seis meses mientras dure la investigación de la Fiscalía.

El abogado defensor de Uria Jorge Valda manifestó que en contra de su cliente se ha armado un “fraude procesal, un montaje procesal” después que el juez Román Loayza rechazó otorgar una acción de libertad a favor del cocalero.

Protestó porque a las 9:50 recién fue notificado cuando ya había sido aprehendido, asimismo, dijo que la hora de su audiencia fue notificada para las 22:00, sin embargo esta luego se realizó con defensa pública.

Valda manifestó que una vez más se demuestra que los procesos se realizan en indefensión porque se oculta la información para asumir la defensa de su cliente, además de ocultar los actos irregulares de jueces y fiscales y lógicamente de la Policía

Añadió “que los actos de infiltración policial son prohibidos y su autoridad estaría pretendiendo avalar actos o reportes de inteligencia de policías infiltrados que no tienen valor alguno”, manifestó.

//FUENTE: ANF//