Con una inversión que supera los Bs 820 millones, el departamento de Chuquisaca concentra una veintena de plantas transformadoras de alimentos e industrias conexas que, según el proyecto del gobierno de Luis Arce eran llamadas a «diversificar la economía y sustituir las importaciones».
Sin embargo, la mayoría no logra cubrir los niveles de producción proyectados e incluso hay casos que no llegan ni al 1 por ciento anual. Por ello, surge el fantasma de los «elefantes blancos» y la posibilidad de que estos proyectos solo hayan generado pérdidas económicas al Estado.
PLANTAS DE CHUQUISACA:
Villa Charcas: Planta de semillas de papa – Bs 2,9 millones.
Incahuasi: Centro de transformación de ají – Bs 7,33 millones.
Monteagudo: Planta de balanceado de maíz – Bs 17,43 millones.
San Lucas: Planta de transformación de durazno – Bs 14,2 millones.
Azurduy: Centro de derivados de manzana – Bs 9 millones.
Sopachuy: Procesadora de carne – Bs 4,6 millones.
El Villar: Planta de alimentos balanceados – Bs 6,2 millones.
Huacareta: Complejo de transformación de cítricos – Bs 9,1 millones.
Las Carreras: Procesadora de hortalizas – Bs 12,3 millones.
Macharetí: Procesadora de productos cárnicos – Bs 5,3 millones.
Mojocoya: Centro de beneficiado de trigo – Bs 5,4 millones.
Poroma: Planta de miel – Bs 4,2 millones.
Presto: Planta de acopio y transformación de chirimoya y durazno – Bs 9,4 millones.
Culpina: Vivero frutícola – Bs 4,3 millones.
Sucre: Planta de rendering (subproductos cárnicos) – Bs 20,7 millones.
Yamparáez: Transformación de granos y cereales – Bs 15,1 millones.
EN FASE DE IMPLEMENTACIÓN:
Planta procesadora de papa en Incahuasi: Bs 161,9 millones.
Industria de Productos del Chaco en Monteagudo: Bs 141,1 millones.
Planta de industrialización de frutas de Los Cintis: Bs 77 millones.
Ampliación de la Planta de Envases de Vidrio en Zudañez: Bs 260,7 millones.
Planta de alimentos balanceados (pollo, cerdo y pescado): Bs 11,06 millones.
El exsecretario de Desarrollo Productivo de la Gobernación de Chuquisaca, Félix Almendras, advierte que la mayoría de estas plantas están sobredimensionadas y carecen de un plan integral que garantice su funcionamiento:
“Primero se debe mejorar el volumen y luego la calidad. Hemos pensado en plantas transformadoras y no en qué vamos a transformar”, señaló.
La planta de chirimoya en Presto es un ejemplo preocupante. Fue diseñada para procesar 2.000 toneladas anuales, pero la producción de toda la zona apenas alcanza 10 toneladas al año. La brecha condena la infraestructura a la subutilización y refuerza la idea del “elefante blanco”.
Otro obstáculo es la administración. Muchas de estas plantas quedarán bajo la responsabilidad de los municipios, cuyos presupuestos son limitados y, en plena crisis económica, apenas alcanzan para gastos básicos de funcionamiento. Sin logística, sin técnicos especializados y sin materia prima suficiente, el riesgo de paralización aumenta.
Desde el ámbito empresarial, las preocupaciones van más allá de la gestión. Para Ernesto Poppe, presidente de la Federación de Empresarios Privados de Chuquisaca, el problema radica en el enfoque mismo del modelo estatal de industrialización. “En criterio personal, el Estado no debe ser un competidor en actividades que le competen al empresario. Su rol debe ser generar condiciones para que el emprendedor produzca, innove y genere empleo”, sostiene.
Poppe considera que el Estado puede intervenir en sectores estratégicos, pero advierte que muchas empresas públicas, lejos de dinamizar la economía, están generando déficit. “Hay ejemplos como la Empresa Nacional de la Construcción, que fue equipada con todo, pero hoy no se sabe dónde está. En lugar de crear riqueza, algunas empresas están generando pobreza”, señala.
El presupuesto departamental también es parte del problema. Chuquisaca destinaba alrededor de 350 millones de bolivianos para el funcionamiento total, pero para 2026 apenas contará con 310 millones, mientras sus competencias siguen aumentando.
A nivel nacional, se contabilizan más de 170 plantas industriales en implementación, con una inversión que supera los 3.500 millones de dólares.
- //FUENTE: ERBOL/ Adaptación y edición V21//


