El primer mes de gestión del presidente Rodrigo Paz, fue valorado como “positivo” y “con buenas señales” por analistas políticos, quienes observaron un clima de moderado optimismo en la población debido a las primeras decisiones económicas y políticas asumidas por el nuevo Gobierno.
El analista político Ricardo Paz afirmó que los primeros 30 días del mandato muestran un escenario alentador, marcado por la estabilidad del tipo de cambio, el freno a la inflación y la garantía en la distribución de combustibles. Señaló que el Jefe de Estado optó por una “actitud pragmática” y por avanzar “según las señales de la economía”.
“El Gobierno ha elegido una estrategia que no es de shock. Eso da pie a la esperanza, al optimismo; permite prever que estamos saliendo poco a poco del pozo”, expresó.
Para el politólogo Paul Coca, este periodo se caracterizó por una “predisposición absoluta” del mandatario a mantener un “Gobierno de puertas abiertas”, evidenciado en sus encuentros con diversos sectores sociales y productivos para recoger demandas y propuestas. Destacó, además, la intención del Ejecutivo de reinsertar a Bolivia en el escenario internacional.
“Son señales demasiado positivas. La reducción del aparato estatal demuestra una voluntad de ordenamiento, aunque aún falta un análisis profundo sobre las empresas públicas deficitarias y las medidas que se deben asumir. Al Presidente se lo ve honesto, muy abierto y con gran predisposición para escuchar”, sostuvo Coca.
No obstante, ambos analistas coincidieron que las tensiones entre Rodrigo Paz y su vicepresidente, Edmand Lara, marcaron un episodio de turbulencia durante este primer mes. Para Coca, ese desacuerdo fue “una característica visible” en el arranque del Gobierno.
En materia económica, la administración de Paz anunció medidas consideradas relevantes, como la obtención de divisas mediante un crédito de la CAF, la abrogación de cuatro impuestos y la eliminación de aranceles para la importación de tecnología. Sin embargo, estas propuestas aún deben ser tratadas y aprobadas por la Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP) antes de convertirse en políticas efectivas, lo que permitirá evaluar su impacto real.
Actualmente, la agenda de los parlamentarios está concentrada en el proceso de selección de los nuevos vocales del Tribunal Supremo Electoral (TSE).
//FUENTE: LOS TIEMPOS//
